martes, 17 de febrero de 2009

TARTA DE QUESO Y MERMELADA DE FRESA

Está claro que cada cual tiene una concepción diferente de lo que significa "San Valentín". Mientras unos opinan que es una festividad inventada por El Corte Inglés y que no deja de ser un día para aprovechar y hacer campaña fomentando que la gente compra algo para sus respectivas parejas, otros piensan que es una buena ocasión para hacer algo especial con éstas, pero en cualquier caso, ambas opciones tienen un factor común, el término pareja. Como la autora de éste blog carece de ella (aunque ello no implique que sepa de sobra quien es el hombre de su vida (su padre) jeje)decidió celebrar el 14 de febrero a su manera...o dicho de otra forma, cocinando algo dulce pero sin empalagos y regalárselo al hombre de su vida con quien compartió además una buena botella de vino, un partido de fútbol y unas risas.
En un principio iba a hacer unas trufas que sé que son su perdición, pero por aquello de renovarse o morir y de aprovechar lo que tenia en casa sin necesidad de salir a comprar nada, hice esta tarta que resultó un éxito( no como las fotos que le hice que no hicieron justicia ninguna y que dejaron bastante que desear)pero seguro que estareis de acuerdo conmigo en que los regalos hechos con el corazón siempre son los mejores y que no precisan de nada material para obtener el resultado óptimo.
Una vez confesado mi gran "complejo de electra" y mi adoración a mi papá....¡que viva San Valentín!

INGREDIENTES:

-200ml de nata líquida 35% m.g
-1 tarrina de creme fraiche president (nata espesa)
-4 cucharadas soperas de azúcar
-1 tarrina de queso crema tipo philadelphia
-200 gr de galletas digestive
-2 huevos
-una pizca de canela
-3 cucharadas de margarina
-mermelada del sabor que se prefiera.

Y AL LÍO:

Para la base, trituraremos las galletas y derretimos la margarina en el microondas hasta que quede líquida para juntarla a las galletas y disponerlo una vez ligado y con la canela, en el fondo del molde. Reservar en la nevera mientras hacemos la crema de queso.
Para la crema de queso, disponemos en un bol la nata junto con la creme fraiche, el queso crema y el azúcar y batimos bien para que quede cremoso y sin grumos.
Seguidamente añadimos un huevo y removemos hasta ligarlo antes de añadir el siguiente para que no haga burbujitas y quede aire porque luego queda la textura como hueca si lo ligamos mal.
Una vez ligados los dos huevos a la crema de queso, la ponemos sobre la base de galletas y horneamos durante 30 minutos a 170º.
Dejar enfriar y ayudándonos de una lengua de cocina disponer una capa de mermelada por encima.

NOTA: Si dejamos que se enfríe durante un par de horas en el frigorífico antes de comerla mejor, puesto que se asientan los sabores y la textura queda más compacta.

A esto le llamo yo un bocadito dulce....sin empalagar, vamos, más o menos como definiría yo el San Valentin perfecto jeje.

1 comentario:

kike dijo...

yo no digo ná que luego la parienta se me enfada, pero pastelito dice que cambies de una vez a tu papá por él que contento lo tienes jajajaja, entre que ya le haces la competencia en la repostería y encima luego no te la comes con él, lleva un cabreo de mil demonios!
¡¡¡Haz algo!!!

un beset apañá!